
Este no es un juego recomendable si no hay suficiente confianza, si existen
represiones, traumas o prejuicios o si se tienen tabús en tema de sexualidad.
Tampoco es un juego aconsejable para personas demasiado posesivas, celosas,
inseguras o pudorosas.
Igualmente no es apto para personas intolerantes o con fuertes
condicionantes morales.
También es importante destacar que personas con falta de control
eyaculatorio...