INDICACIONES
Si finalmente os decidís a jugar, antes de proceder por primera vez, hay
que leer detenidamente estas bases con la pareja y después definir los límites
a los que estáis dispuestos a llegar.
Quizá al principio os pueda parecer un poco complejo, pero después os
percataréis que todo tiene un propósito y en la práctica, en realidad resulta
mucho más sencillo.
OBJETIVOS
Las finalidades principales del juego son la excitación, la experimentación
y el acercamiento a las fantasías y deseos de la pareja, cosa que implica tener
mayor comunicación, sinceridad, abertura y confianza.
Otro objetivo importante es tener más sexo, aparte de gozar más de los
encuentros sexuales con la pareja de una manera seguramente distinta a como lo
podéis hacer normalmente.
Al mismo tiempo se busca superar los tabús y atreverse a experimentar de
todo junto a la pareja de forma saludable, abriéndonos así a nuevas formas de
placer.
Con el juego también se pretende dotar a la acción de otros sentimientos y
experimentar el deseo, la satisfacción o la frustración, la humillación, la
paciencia, la entrega, la confianza, la sensibilidad, la afectuosidad, la
rudeza, la ternura o incluso la animadversión, etc.
Igualmente se busca revivir la pasión como adolescentes gobernados en sus
acciones, en este caso, por las reglas del juego.
Por algunos de los papeles a representar, también nos permitirá valorar qué
es lo que se tenía o cómo era vuestra relación y vivir así diferentes estados
posibles totalmente opuestos, siempre con la intención de mejorarla.
También vamos a aprender a conducir y experimentar el hecho de ser
conducidos, porque al fin y al cabo los seres humanos nos movemos entre estos
dos tipos de personas. Así, en la vida a veces podemos encontrar varias
situaciones en las que no sabemos cómo comportarnos y es más fácil tener a
alguien que nos diga qué debemos hacer. Entonces, para que las cosas funcionen
en una relación, deberemos ser uno u otro quien conduzca a la pareja y en semejante
menester, los dos se deben ir relevando de manera equitativa.
Llevaremos el sexo a la perfección y profesionalidad doméstica.
Y por último, a veces igualmente podremos descentralizar el sexo del coito.